Mucha gente sigue confundiendo ambas cosas. Sin embargo, es importante conocer las herramientas disponibles para proteger nuestros datos y privacidad en Internet. Los cortafuegos y las redes privadas virtuales (VPN), aunque ambos sirven para mejorar la seguridad, tienen funciones y aplicaciones diferentes.

¿Qué es un cortafuegos?

Un cortafuegos es un dispositivo de seguridad que supervisa y controla el tráfico que entra y sale de tu red según unas reglas predefinidas.

Actúa como un filtro entre su dispositivo o red e Internet, bloqueando o permitiendo el paso de datos según estas reglas. Los cortafuegos pueden ser de hardware o software y son esenciales para proteger las redes de accesos no autorizados y amenazas como virus e intentos de piratería.

Los cortafuegos inspeccionan los paquetes de datos entrantes y salientes, analizando elementos como el origen, el destino, el tipo de datos, la dirección IP y el número de puerto. A continuación deciden, basándose en reglas establecidas, si estos paquetes deben permitirse o bloquearse.

¿Qué es una VPN?

Una VPN es un servicio que crea un túnel cifrado para sus datos de Internet, garantizando una transmisión segura y privada.

Al utilizar una VPN, su actividad en línea queda enmascarada y protegida de miradas indiscretas, incluidos su ISP o los administradores de la red. Una VPN también oculta su dirección IP real, sustituyéndola por la del servidor VPN, lo que puede ayudarle a eludir restricciones geográficas y acceder a contenidos bloqueados.

El funcionamiento de una VPN comienza con la aplicación en su dispositivo, que cifra sus datos antes de que salgan de su ordenador o teléfono. A continuación, estos datos cifrados viajan a través del túnel seguro hasta el servidor VPN, donde se descifran y se envían a su destino final. De esta forma, aunque alguien intercepte tus datos, serán indescifrables.

¿Cuándo utilizar un cortafuegos o una VPN?

Utiliza un cortafuegos si quieres proteger tu red corporativa o doméstica de accesos no autorizados y controlar el tráfico en busca de comportamientos sospechosos. Los cortafuegos son especialmente útiles para bloquear el tráfico malicioso y controlar el acceso a determinadas aplicaciones o sitios web.

Utilice una VPN si se conecta con frecuencia a redes Wi-Fi públicas no seguras, necesita acceder a contenidos con restricciones geográficas o simplemente desea una capa adicional de privacidad y seguridad para su actividad en línea. Una VPN también es útil para las personas que viajan con frecuencia y necesitan acceder a contenidos o servicios restringidos en determinados países.

¿Se pueden utilizar juntos un cortafuegos y una VPN?

Sí, e incluso se recomienda para optimizar la seguridad.

Un cortafuegos y una VPN ofrecen tipos de protección complementarios. El cortafuegos actúa como barrera principal contra las amenazas externas y el tráfico no autorizado, mientras que la VPN protege sus datos y su privacidad en línea.

Tenga en cuenta que algunos cortafuegos pueden bloquear las conexiones VPN, por lo que será necesario ajustar las reglas del cortafuegos para permitir el tráfico VPN.

Reflexiones finales

Comprender la diferencia entre un cortafuegos y una VPN le ayudará a elegir las herramientas adecuadas para su seguridad en línea. Un cortafuegos protege tu red de intrusiones y amenazas externas, mientras que una VPN protege y privatiza tu actividad en línea estés donde estés.

Juntos, forman una potente combinación para proteger tus datos y tu privacidad en el mundo digital.

Daniel Morales

Joven experto en tecnología, dedicado a desmitificar los VPN y a reforzar la seguridad de los datos para una era digital más segura.