¿Qué oculta una VPN en Internet? Esta es una pregunta frecuente, y a veces las respuestas son bastante vagas. En realidad, una red privada virtual permite ocultar lo más importante de todo, la vida privada de un internauta, a cualquiera que quiera mirar de forma indiscreta o incluso curiosa. Este artículo analiza en detalle lo que realmente oculta una VPN.
¿Qué es una VPN?
Las siglas VPN significan Red Privada Virtual. La traducción exacta al francés es Réseau Privé Virtuel (RPV para los canadienses). Se trata de un dispositivo utilizado para establecer una conexión segura a través de un túnel que cifra la información personal del usuario. Además de impedir que terceros examinen los paquetes de datos, la conexión a Internet del usuario pasa por un servidor que actúa como intermediario. La dirección IP original se enmascara y se sustituye.
Una VPN se presenta en forma de aplicación compatible con Windows, macOS, iOS, Android, Linux, AppleTV, etc., que puede activarse y/o desactivarse según las necesidades del usuario. Lo ideal es que un internauta esté siempre conectado a través de una red privada virtual.
Su dirección IP está enmascarada
Sin una VPN, todos los sitios web que visita un usuario pueden rastrear su dirección IP, lo que facilita su identificación y localización. Con la VPN, estos sitios sólo ven la dirección IP del servidor, comúnmente conocido como proxy VPN. Para los rastreadores de sitios web, el visitante simplemente se considera anónimo.
Localización geográfica
Las direcciones IP pueden utilizarse para rastrear la posición de un usuario de Internet y desde dónde se conecta. Como se ha mencionado en el punto anterior, los proveedores de VPN tienen servidores en todo el mundo, lo que permite ocultar la ubicación de una persona y fingir que accede a Internet desde otro país. Por ejemplo, si un usuario está físicamente en Brasil y se conecta a un servidor en Portugal, se le asignará una dirección IP portuguesa.
Los internautas o viajeros en países con fuerte censura pueden acceder a contenidos censurados cuando cambian su verdadera ubicación con una VPN. Y para los que están en redes Wi-Fi que bloquean el acceso a ciertos sitios, una VPN elude esta restricción.
Actividad en líne
Con una VPN, los proveedores de servicios de Internet (ISP) ya no pueden rastrear los hábitos de navegación porque el proceso de cifrado codifica toda la información relativa a la actividad en línea del abonado. Las señales transmitidas son ilegibles en ambas direcciones (el término cifrado es impreciso).
La encriptación es el acto de codificar información para que sólo el destinatario previsto pueda entenderla. Una aplicación criptográfica convierte un mensaje en una secuencia totalmente indescifrable. Aunque un tercero se haga con ella, no podrá acceder a los datos.
La mejor VPN siempre ofrecerá AES-256 porque es prácticamente imposible de descifrar. De hecho, este conjunto de procesos utiliza claves de 256 bits que generan más combinaciones de las que el hardware informático actual puede calcular en un tiempo razonable. Estamos hablando de miles de años de cálculos.
Atención. Si el usuario está conectado a un servicio como Google o Microsoft, siempre podrán rastrear el comportamiento de un abonado conectado a través de su cuenta. En cuanto a la dirección IP, dependiendo de la localización del servidor VPN elegido por el usuario, GAFA simplemente asumirá que el usuario está navegando desde otra localización (e incluso así, no hay certeza).
Dados pessoais
El famoso encapuchado que acecha en la esquina y se conecta al Wi-Fi del Starcafé…
Aunque suene irónico, esta información sobre los datos personales es cierta, aunque se utilice en exceso como argumento de venta. Al principio, eran las empresas las que las utilizaban, y es fácil ver por qué. Si encontramos esta información sobre las VPN para particulares, se debe en gran parte al Wi-Fi que está disponible prácticamente en todas partes en las zonas de mucho tráfico.
En inglés, el término utilizado es «man in the middle». Se trata del tipo inverosímil que aparece en una fiesta sin que nadie le haya invitado ni le conozca. La Wi-Fi pública no es segura, y una contraseña para acceder a ella no es garantía de seguridad, ya que sólo se bloquea el acceso en un primer momento.
La práctica de robar paquetes de datos a través de Wi-Fi públicas está muy extendida en Estados Unidos. Por regla general, son los Script Kiddies quienes llevan a cabo estas actividades de pirateo. Un Script Kiddie suele ser un adolescente que utiliza códigos de piratas informáticos encontrados en Internet con la intención de recuperar información confidencial que pueda venderse en Internet.
Las redes privadas virtuales, incluso las VPN gratuitas, protegen contra esta posibilidad, pero el software antivirus no.
En conclusión, una VPN realmente oculta tus actividades en línea, siempre y cuando no estés conectado e identificado con un servicio como Facebook, Gmail, Amazon, etc.